Vaginoscopía: la vaginoscoía es una herramienta de gran importancia en el asesoramiento del servicio canino. El vaginoscopio permite ver los cambios de la mucosa vaginal a lo largo del ciclo reproductivo como así también las alteraciones de la misma. El mismo es un tubo rígido de aproximadamente 30 cm de largo provisto de fibras ópticas y de una fuente de iluminación.

Citología vaginal: se realizan extendidos o frotis de la mucosa vaginal, los cuales orientan sobre el mejor momento para realizar determinaciones hormonales que a su vez permiten conocer la fecha de ovulación de una perra. También se la utiliza como ayuda en el diagnóstico de infecciones vaginales y/o uterinas, y cuando se tiene la incertidumbre sobre la ocurrencia o no de un servicio (por ejemplo una perra que se escapó de su domicilio en celo), ya que la presencia de espermatozoides en un frotis vaginal confirma el hecho, aunque la ausencia de los mismos no lo descarta.

Determinaciones hormonales: pueden realizarse mediciones de los niveles de las hormonas progesterona o luteinizante en sangre para conocer la fecha de ovulación de una perra. La fecha de ovulación a su vez sirve para decidir el mejor momento para servir a la hembra, y para conocer la fecha de parición de la misma. En caso de trastornos reproductivos se puede medir el nivel de tiroxina (hormona producida por la glándula tiroides) en sangre, cuya hipofuncionalidad puede causar problemas reproductivos. Otras determinaciones que se pueden realizar son mediciones de cortisol, estradiol y testosterona en sangre. Dichas mediciones hormonales se determinan por medio de radioinmunoensayo, método de alta sensibilidad.

Espermogramas: estudio que permite conocer la calidad del semen de un reproductor, como así también determinar alteraciones reproductivas tales como enfermedades prostáticas, obstrucción epididimal, eyaculación retrógrada, etc.

Cultivos y antibiogramas: en caso de infecciones del aparato reproductor los cultivos permiten conocer la o las bacteria/s implicadas, y el antibiograma tratarla/s correctamente.

Entre los protocolos empleados en reproducción se pueden citar: Inducción no hormonal de celo: es el desencadenamiento de un ciclo estral (celo). Está indicado en ausencia de ciclos, cuando el período entre celos (intervalo interestral) es muy largo, o bien si el propietario quiere aumentar el número de camadas por año. Es muy importante realizar un estudio completo de la perra antes de iniciar el tratamiento debido a que la inducción de ciclos está contraindicada cuando existe alguna enfermedad reproductiva subyacente.

Interrupción no hormonal de las gestaciones no deseadas: la interrupción no hormonal y luego de realizado el diagnóstico de gestación es el método menos riesgoso (tanto para la vida de la hembra como para su futuro reproductivo) y mas usado en otros países para este fin.

Los estudios complementarios y los protocolos permiten entre otras cosas realizar un asesoramiento reproductivo correcto, ya sea para realizar servicios naturales o por inseminación artificial con alto grado de éxito, logrando además mayor número de cachorros por camada y mayor cantidad de camadas por año, como así también para diagnosticar y tratar adecuadamente diversas alteraciones del aparato reproductor.